En el Evangelio de Juan encontramos las siguientes palabras de Su Excelencia el Mesías Yeshúa:
No obstante la hora ha llegado, y ya es el momento, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en Espíritu y Verdad; pues el Padre busca, a tales adoradores, para que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoren, es preciso que le adoren en Espíritu y Verdad.
Juan 4: 23-24
Lo primero que debemos entender es que, la palabra ‘adorar’ en el contexto Bíblico y hebreo significa (postrarse, arrodillarse, rendirse, doblegarse ante la autoridad de alguien).
Lo segundo es que, cuando dice “en espíritu y verdad” esa expresión significa “conforme a”, en este caso, conforme al Espíritu y Verdad”.
Por tanto, hay que buscar qué es aquello que representa la Autoridad de Dios ante la cual debemos rendirnos, y que también es Espíritu o Espiritual y Verdad.
Tu Justicia es Justicia eterna, y tu Toráh [Ley] es la verdad.
Salmos 119: 142
Santifícalos en la verdad, tu Palabra es la verdad.
Juan 17: 17
Y pondré dentro de ustedes mi Espíritu, y haré que anden en mis Leyes, y guarden mis Decretos, y los pongan por obra.
Ezequiel 36: 27
Y endurecieron su corazón como el diamante para no oír la Toráh [Ley] ni sus Palabras, las cuales YHWH Tsevaot envió por medio de su Espíritu, a través de los primeros profetas. Por tanto, una gran indignación ha venido de parte de YHWH Tsevaot.
Zacarías 7: 12
Porque sabemos que la Toráh [Ley] es espiritual.
Romanos 7: 14a
Así que la Toráh es la Autoridad del Eterno Dios, y Ella es espíritu y verdad. Por tanto, adorar al Padre en Espíritu y Verdad, es vivir conforme a su Palabra, a su Toráh.
Pero cuando venga Aquél, el Espíritu de la Verdad, les guiará hacia toda la verdad; pues no hablará por sí mismo, sino que hablará cuanto oiga, y les anunciará las cosas por venir.
Juan 16: 13
