La Biblia enseña:
Entonces cierto Ananías, un varón temeroso conforme a la Toráh, que recibía aprobación de todos los judíos que vivían allí, vino hasta mí, y acercándose, me dijo: Hermano Shaúl, recupera la vista. Y en aquel momento, miré hacia él. Entonces él dijo: El Dios de nuestros padres te ha escogido para que conozcas su voluntad, y veas al Justo [a Yeshúa] y oigas la voz de su boca. Porque tú le serás testigo ante todos los hombres de lo que has visto y oído. Ahora, pues, ¿qué te detiene? ¡Levántate y bautízate! Y cuando estés lavando tus pecados, invoca su Nombre [el de Yeshúa].
Hechos 22:12-16
La Biblia enseña que, para que Shaúl (Pablo) fuese sanado de su ceguera, se usó a un varón temeroso conforme a la Toráh. Este varón oró por Pablo, el cual le ordenó bautizarse en el Nombre de Yeshúa.
Para sanar la ceguera espiritual de tantas personas que están imbuidas en sus dogmas y doctrinas religiosas como lo estaba Pablo, se necesita de hombres temerosos conforme a la Toráh. Por eso el Eterno Dios está levantando en este tiempo personas que cuentan con esa cualidad (temerosos conforme a la Toráh) para traer vista a los ciegos.
Y tú, ¿eres un temeroso conforme a la Toráh, o aún estás ciego?