Stephen Hawking es el científico que más ha desarrollado una teoría sobre las curvaturas del espacio-tiempo dentro de los llamados “horizontes de sucesos”.
A partir de sus estudios la física a reorientado todos sus estudios hacia los famosos agujeros negros o como los llama Hawking singularidad. Esto ha derivado que se crea que el Universo fue el resultado de una singularidad a partir de lo que conocemos como el Big Bang.
En su libro, titulado “Historia del Tiempo”, Hawking escribió que si algún día lográramos comprender la teoría cosmológica global, seríamos capaces de conocer “la mente de Dios”.
No hay ningún Dios. Soy ateo
Stephen Hawking
En una entrevista concedida en exclusiva a EL MUNDO, el astrofísico británico explicó: “En el pasado, antes de que entendiéramos la ciencia, lo lógico era creer que Dios creó el universo. Pero ahora la ciencia ofrece una explicación más convincente. Lo que quise decir cuando afirmé que conoceríamos la mente de Dios era que comprenderíamos todo lo que Dios sería capaz de comprender si acaso existiera. Pero no hay ningún Dios. Soy ateo.” Y añadió que: “la religión cree en los milagros, pero estos no son compatibles con la ciencia.”
Pero, lo que no esperaba el mismo Hawking y la comunidad científica fue que la cosmóloga y teórica física catedrática de la Universidad de Carolina del Norte Laura Mersini-Houghton demostrara que los agujeros negros supermasivos tal como los describe Hawking no existen por lo que la teoría misma del Big Bang resultaría ser infundada y sin ninguna base.
Según la demostración de los cálculos que hizo la cosmóloga albanés, antes de que un agujero negro se pueda formar, la estrella moribunda se expande y explota, pero la singularidad tal y como la predijo Hawking nunca se forma, ni mucho menos el horizonte de sucesos.
Pero los cómputos de la Dra. Laura derribarían la Vaca Sagrada de la física en los últimos años, la teoría del Big Bang, ya que éste solo podría tener efecto si fuera el resultado de una singularidad producida hace unos 13.800 millones de años. Dado que los cálculos de la profesora imposibilitan la existencia de la singularidad, no habría ningún punto de partida para el Big Bang.
Dice el necio en su interior: ¡No existe Dios!” Corrompidos están, por lo que da asco su conducta, y ninguno de ellos hay quien haga el bien.
Salmos 14:1
El propio Hawking admitió en una reciente aparición pública que todavía era incapaz de demostrar matemáticamente una singularidad, lo que quiere decir que le es imposible explicar por qué existe el Universo, aunque la catedrática logró demostrar matemáticamente que no hay ninguna posibilidad de formación de una singularidad.
Los cálculos matemáticos de la Dra. Mersini-Houghton han obligado a los científicos simpatizantes de Hawking a regresar a la mesa a replantearse comenzando de cero ¿por qué existe el Universo? Tal vez si volvieran su mirada a la Biblia hallarían la respuesta correcta.