En tiempo de Ácimos o Panes sin levadura según el Calendario Bíblico, y de acuerdo con la orden dada por nuestro Señor hay que sacar toda levadura de nosotros, y una de ella es la “Levadura de Arrogancia – Malicia y Maldad”.
No es buena la arrogancia de ustedes, ¿acaso no saben que un poco de levadura leuda toda la masa? Límpiense de la vieja levadura, para que sean masa nueva, como deben ser, sin levadura, porque el Mesías, nuestro Pésaj, ya fue sacrificado. Así que sigamos celebrando la Fiesta, pero no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con ácimos de sinceridad y de verdad
1 Corintios 5:6-8
El apóstol Pablo habló de la levadura de malicia y maldad, pero ella halla su base en la arrogancia del hombre. Tal vez el mayor enemigo de nosotros, somos nosotros mismos, y es donde más nos cuesta ceder o aceptar los errores.
Temer a YHWH es aborrecer el mal. Pues la soberbia y la arrogancia que llevan por el mal camino, y la boca perversa, YO aborrezco.
Proverbios 8:13
El Eterno Dios aborrece la arrogancia pues siempre conducirá al hombre por el camino del mal. Es por eso por lo que la arrogancia es una de las cosas que más daño nos hace. Tal vez es la levadura más difícil de deshacer de nosotros, porque significa renunciar a nosotros mismos.
El malo, por la altivez de su rostro, no busca a Dios; y Dios no está en ninguno de sus pensamientos.
Salmos 10:4
El peligro de la arrogancia es que lleva al hombre a negar al Creador, por eso YHWH quebrantará en el día final toda arrogancia.
La altivez del hombre será abatida, y la arrogancia de los hombres será humillada; y solo YHWH será exaltado en Aquel Día.
Isaías 2:17
